Etiquetas

Aeropuerto

Explorar

El día se iba a presentar movidito desde bien entrada la mañana, toda la noche había estado lloviendo y las «relucientes» calles de Delhi estaban encharcadas a conciencia, hasta la hora de comer teníamos en mente visitar Old Delhi, la zona más caótica y enmarañada de toda la ciudad, para la tarde volveríamos a Main Bazar para comer, con la intención de reencontrarnos con Blai que por esas horas ya debería haber llegado su tren desde Jaipur.

¿Tendríamos esta vez tiempo para conversar y compartir tiempo con Blai esta vez? En esta entrada lo descubriréis.

Amanecía el último día completo que pasaríamos en Nepal, ya que al día siguiente volveríamos a volar rumbo a India, las sábanas se nos pegaron como nunca antes en las más de 2 semanas que llevábamos de viaje, tanto fue eso, que nos levantamos con la hora justa para ir a comer.

Este día lo dedicaríamos a conocer Thamel visitar tranquilamente por la ciudad, comprar algunos detallitos y despedirnos de Nepal hasta una futura visita.

Cuando llegamos a las 3 y media de la mañana al Aeropuerto Internacional de Nueva Delhi Indira Gandhi, nada o casi nada parecía que hubiera cambiado, el aspecto de la terminal se asemejaba a cualquier aeródromo de entre los más modernos que podemos encontrar en Europa. Únicamente la decoración y los encargados del control nos hacían indicar que nos encontrábamos a miles de kilómetros de distancia de casa.

El día 20 de viaje comenzaba a 10.000 metros de altitud. A duras penas pudimos echar una cabezada, pese a que el cansancio de no poder descansar en una cama aquella noche comenzaba a hacerse palpable. Pasadas las 6 de la mañana aterrizamos en el Aeropuerto Internacional de Moscú-Sheremétievo. Una basta nación se abría ante nosotros, aunque teníamos pocas horas para visitarla. Una cosa está clara cuando entramos en suelo ruso, este país no está esperándonos con los brazos abiertos para que lo visitemos, es un Estado que vive y respira para los rusos, otra cosa es que nosotros, incautos viajeros, nos queramos inmiscuir en sus asuntos.

Como siempre la noche antes de partir había servido para dar vueltas en la cama y dormir lo justo, pese a que saldríamos de Málaga un 19 de Julio y dos días después estaríamos en India, no había manera de relajarse, este prometía que no iba a ser un viaje más, estaríamos 22 días fuera de casa y eso nos suponía estar el mayor tiempo fuera hasta la fecha, encima lo haríamos en Asía, un nuevo continente se presentaba frente a nosotros e íbamos dispuestos a darlo todo.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies