Llegaba uno de los días más esperados en nuestro viaje a Japón, aquel primer domingo del mes de Abril celebraríamos el cumpleaños de la prima de Carmen. Contaríamos con la presencia de las compañeras de trabajo del tablao flamenco en donde se encontraba por aquellos meses dando clases. El día comenzaría con una visión de Osaka desde el Umeda Sky Building para luego conocer su famoso barrio Dōtonbori. La tarde estaba reservada para un opíparo almuerzo con gran cantidad de platos de la cocina japonesa y un posterior festejo en el karaoke.
Si duda una de las jornadas que más juego dieron durante todo el viaje y en la que se vivió uno de los mejores «Momentos Estelares».
