En esta ocasión el cine nos lleva al país más poblado del mundo: China. Aquí se desarrolla la película de 1987, “El último emperador”, dirigida por el director italiano Bernardo Bertolucci, al que los cinéfilos también conocerán por su anterior clásico «El último tango en París». Esta película está basada en la autobiografía de Aisin-Gioro Pu Yi o Puyi para los amigos, seguramente con este nombre diréis: «La madre que lo parió ¿Quién es ese?» pues bajo ese nombre se esconde el último emperador de China, perteneciente a la dinastía chino-manchú de los Qinq, reinando con el título de Emperador Xuantong. Fue protagonizada por John Lone, Joan Chen, Peter O’Toole, Ruocheng Ying, Victor Wong, Dennis Dun, Ryuichi Sakamoto, Maggie Han, Ric Young, Vivian Wu y Chen Kaige. Como era lógica, la mayoría de los actores presentes son asiáticos, por lo tanto menos conocidos desde el prisma occidental, pero si hay que destacar entre todos ellos la participación de Peter O´Toole, el célebre actor inglés que fue protagonista en la histórica «Lawrence de Arabia».
Esta película narra la vida del emperador tomando, como decíamos antes, sus propias memorias reflejada en «Yo fui emperador de China». Sin duda estamos tratando de todo un clásico del cine, pues recibió nada menos que 9 Oscars en el año 1988 en las categorías de mejor película, mejor director, mejor guion adaptado, mejor música, mejor fotografía, mejor dirección artística, mejor vestuario, mejor sonido y mejor montaje, una auténtica pasada.
La sinopsis se centra en la vida de Puyi, el que fue el último emperador de China, que a la temprana edad de 3 años tomó el trono, teniendo a su orden a más de 500 millones de personas que los consideraban una divinidad. Desde la Ciudad Prohibida gobernó hasta que las fuerzas republicanas consiguieron abolir la corte imperial. Desde ese momento vemos al personaje crecer en una realidad distinta a la que estaba acostumbrado, y dificultosamente, al no encontrar un hueco en esa nueva sociedad que estaban originándose hasta llega a la presidencia de Mao Zedong.





La película transcurre casi en exclusiva en las dependencias de la Ciudad Prohibida, como singularidad, fue la primera película que obtuvo permiso de las autoridades chinas para rodar en su interior, por lo que esta producción de China, Italia, Reino Unido y Francia fue toda una pionera, desde entonces se ha abierto la veda a otras películas, aunque sin duda esta es la que mejor presente ese icono de la capital china. Durante la película también se ven algunos espacios de la propia ciudad de Pekín, la estación de tren de Changchun en la provincia de Jilin, así como la región histórica de Manchuria en el noreste de China que, a finales del siglo XIX, fue disputada tanto con Japón como con Rusia y que tendrá una importancia capital durante la película.
Por lo que indudablemente será un placer descubrir cómo es la Ciudad Prohibida cuando está libre de turistas, algo que difícilmente podremos hacer hoy en día si la visitamos. Aunque la historia es fiel reflejo de los acontecimientos que pasaron, sí que se tomaron algunas licencias (no leer sí no se ha visto a partir de aquí el resto del párrafo): cuando ocurre la muerte de su madre, en la película le cierran las puertas para que no pueda abandonar la Ciudad Prohibida, mientras que en sus memorias indica que sí lo hizo. Al igual que mantiene en su autografía que no mantuvo relaciones sexuales con sus esposas, algo que en la película sí que realiza. Por último el chofer y amante de la Emperatriz muere, pero en la realidad Puyi impidió a los japoneses que lo asesinaran.
Sin duda fue una película de gran envergadura para la época, pues algunas escenas contaron con más de 20.000 extras, muchas de ellas fueron asesoradas por el hermano menor del último emperador, Pujie. En cuanto a su premiada banda sonora, corrió a cargo del músico japonés Ryūichi Sakamoto junto a David Byrne y Cong Su, muy interesante su tema «Rain – The Last Emperor Theme», como última curiosidad, ese mismo compositor nipón es conocido por crear el sonido de arranque de la consola Dreamcast.
Nota de El último emperador: 8/10
En conclusión, uno de los clásicos que nos dejó el cine de los años 80, y que todo viajero debería ver, una película larga, dura 160 minutos, pero que sabe mostrar perfectamente uno de los momentos clave del país asiático, y que por su controversia e importancia histórica es de recibo conocer y disfrutar gracias a este gran film.
18 Comentarios
No soy yo muy amante de este tipo de cine y, para no variar con esta sección de tu blog, no he visto la peli.
A lo mejor, después de tu reseña, me animo.
Saludos
Te voy a tener que poner deberes, porque veo ahí muchas lagunas de grandes películas XDDD
¡Saludotes!
La película no la he visto, y puede que no la llegue a ver, pero lo que sí está claro es que, al leer la reseña, me han entrado unas ganas enormes de viajar a China.
No me cabe duda que si nos animamos a ir por China, esta película caerá, porque dudo que lleguemos a ver nunca la Ciudad Prohibida tan vacía como en este film 😀
La vi cuando se estrenó y recuerdo que me encantó. Tengo que volver a verla.
Un saludo
Carmen
Una de esas películas históricas que hay que ver, especialmente si queremos conocer un poquito más el país, todos los galardones recibidos estuvieron más que justificados.
¡Saludotes!
Pues me pasa como a Helena y tampoco he visto esta peli. A priori no me llamaba la atención, pero la verdad es que por lo que cuentas, puede ser una buena forma de viajar a la Ciudad Prohibida de Pekín desde el sofá!
En caso de no ser muy de películas históricas, se puede hacer un tanto pesada, pero sí te gusta saber un poco más de la historia del país y disfrutar de unos parajes ideales, como son algunas de las estancias de la Ciudad Prohibida, desde luego que lo merece 🙂
Buenísima elección José Carlos. El último emperador es un peliculón con mayúsculas. Bertolucci, no suele fallar… La he visto dos veces. Una, centrándome en la trama, y la otra, en los detalles de la espectacular Ciudad Prohibida. ¡Qué ganas de ir a China! Saludos 🙂
Es verla y que entren unas ganas locas de ir a China y visitar la Ciudad Prohibida, aunque me temo que nunca la veremos tan despejada como en la película, habrá que luchar con unos cuantos cientos de visitantes más 🙂
¡Saludotes!
Me suena de haberla visto hace años, pero tendré que verla de nuevo porque ni me acuerdo. El escenario, imponente.
Anda que no habremos visto películas hace años, que ahora las ves y parece que la has visto por primera vez, seguro que cuando la veas además de viajar con ella, te entretiene como la primera vez 😀
un peliculón, sin duda!!Recuerdo unos escenarios espectaculares! Un saludo
Sí la base visual es buena, con ese marco incomparable como es la Ciudad Prohibida, y le sumamos una buena elección de personajes y un buen director, estaba claro que al final tenían que salir una gran obra, como la que salió 😀
¡Un saludote!
Para mí una película magnífica. La vi justo al regresar de China y me pareció maravillosa. Coincido mucho en la crítica y en la nota que le das. Una película muy emotiva y cuidada 🙂
Sin duda ideal para ver antes o después, yo espero volver algún día de China, revisionarla y decir: «Eh ahí he estado yo» 😀
¡Saludotes!
Enserio que ando con muchas ganas de ver esta peli,Sabes donde la puedo ver por internet?? Es que venden el dvd pero no puedo comprarlo. algunos clips que vi me gustaron mucho.Justamente conoci a sakamoto por la musica de esta película, enserio que es una maravilla la musica que hace, me incitó a aprender piano y cello. Saludos desde Argentina!
Recientemente he visto un pack que incluye esta película y otras tantas de lo más interesantes: El último Emperador.
Mira si en Argentina está disponible, pues en plataformas digitales solo la encuentro actualmente en Movistar España.
Un saludote.