Reseña Finca Fabiola – Finestrat

Durante nuestra escapada por la costa levantina, quisimos estirarla un poco más y después de visitar Marina d´Or nos dejamos caer por Benidorm, el motivo real era que nos habían invitado al Parque Temático de Terra Mítica, de cuya visita os hablaré en unos días, por lo que lo único que necesitábamos era encontrar un lugar donde alojarnos esa noche por allí cerca.

Aun no nos hemos animado a probar los couchsurfing, una de las formas más económica para alojarse por todo el mundo, en la que te quedas a dormir en casa de alguna persona que ofrece una habitación o sofá sin pedir nada a cambio, no sabemos muy bien si encajaríamos en esa fórmula y como aún no lo hemos probado, pensamos que lo mejor era probar un paso intermedio y buscar algún alojamiento con un enfoque más familiar, el típico en el que no eres un huésped más y los  que lo regenten tengan un cierto trato con sus inquilinos.

Como llegar a Finca Fabiola

Así buscando y buscando algo que encajara en esta idea, acabamos por decidirnos a reservar una noche en Finca Fabiola, un hotel familiar en plena naturaleza a 5 Km de Benidorm y 30 Km de Alicante, en el municipio de Finestrat, en la comarca de la Marina Baja. Su ubicación era estupenda pues estaba a pocos minutos en coche del parque y en una zona tranquila:

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Para llegar no tiene pérdida, una vez llegamos a Benidorm simplemente hay que tomar la CV-758 dirección Finestrat y pararnos en la Pta La Tapia nº70, Buzon 624, Finestrat, Alicante, el parking gratuito y la entrada nos quedará justo a la izquierda de la carrera y hay un cartel bastante grande con el nombre, una idea muy útil es usar el GPS y anotar las siguientes coordenadas: Latitud 38.57047, Longitud -0.17489, nos dejará en la misma Finca Fabiola.

Nada más estacionar en la puerta y acceder por el camino que lleva al hotel, nos comenzamos a dar cuenta que este no era el típico alojamiento en el que llegas y hacer el check-in mostrando tu documentación para poder identificarte, al contrario, nada más caminar unos metros nos recibió Peter que con voz amigable avisaba a Fabiola, la otra parte que gestiona este hospedaje «Aquí llegan los chicos de Málaga«. Nosotros aún no habíamos abierto nuestra boca, pero ellos ya tenían en mente que aquel día llegaríamos y hasta conocía mi nombre por la reserva, desde luego esa primera impresión ya marca lo que será el resto de la jornada.

La habitación

Lo primero nada más llegar fue preguntarnos que tal había sido el viaje y ofrecernos algo de beber, como veníamos de Oropesa del Mar el viaje no había sido demasiado largo, pero siempre se agradece. Nos comentaron el horario del desayuno para la mañana siguiente que estaba incluido en nuestra reserva y nos mostraron un poco los alrededores de la finca.  Una vez realizadas las formalidades, pero todo de una manera muy coloquial, subimos a nuestra habitación.

Aunque en la primera planta hay varias habitaciones, por disponibilidad tuvimos la suerte de alojarnos en la habitación estrella de finca fabiola, una encantadora estancia en la azotea en la que teníamos una estupenda terraza privada con vistas en 360º a todo el entorno, incluida la piscina.

Con esa privacidad absoluta, entramos en nuestro cuarto en el que encontramos muebles rústicos con una estupenda cama de gran tamaño, armario, una pequeña televisión y un baño completo con una imponente ducha, desde luego mucho más no se podía pedir. Es una habitación que se acaba de estrenar hace poco, por lo que todo estaba nuevo impecable. Sin duda por la noche fue cuando más la disfrutamos, pues era muy relajante sentarse cómodamente en la mesa de la terraza y contemplar la tranquilidad que se respiraba a nuestro alrededor.

Una vez conocida la habitación, el resto de las dependencias de la finca no eran menos, bonitos pasillos con cuadros muy a lo ruta 66, un salón con chimenea donde leerse un buen libro plácidamente con la música de fondo de un fantástico jukebox que dejará loco a los amantes de este clásico dispositivo musical. También si lo queremos podemos pasar por el salón de celebraciones, lugar donde podemos realizar todo tipo de banquetes, para tomar una copa y charlar por allí con cualquiera de los huéspedes que se encuentren, el ambiente es muy familiar e internacional, por lo que seguro que incluso podemos practicar algún que otro idioma, cuando estuvimos había gente inglesa, alemana e incluso de los Emiratos.

En el vídeo de más arriba podéis ver brevemente todo lo que ofrece Finca Fabiola, aunque para notar el cálido trato no os quedará más remedio que pasaros por allí.

La piscina que se encuentra en el patio es un lugar ideal para relajarse, darse un baño y contemplar como anochece. Está preparada de forma que la altura de la misma va creciendo progresivamente según avanzamos hasta llegar a unos 2 metros de profundidad, pero en la zona más próxima a la finca apenas tiene unos 30 centímetros por lo que se pueden bañar allí niños con el control de un adulto sin problemas, sí sois de los que no podéis estar mucho tiempo sin internet, eso no es problema, tenéis acceso gratuito por wifi, simplemente tenéis que pedir la contraseña. Sirven desayunos, comidas y cenas, por lo que no dudéis en sentarse plácidamente en la terraza y degustar sus mejores platos, nosotros cenamos aquella noche y salimos encantados, ensaladas, barbacoa y todo en grandes cantidades, salimos muy contentos y el menú suele rondar los 20 euros, aunque todo dependerá de lo que pidamos, pero seguro que salís muy satisfechos y como no podía ser menos con el trato tan cercano, continuamente se aproximaban a hablar con vosotros y a comentar que tal va nos iba todo, algo que sin duda se agradece y vuelve la estancia mucho más humana y entrañable.

Puntuaciones Finca Fabiola:

– Limpieza/Confort: 

– Ubicación: 

– Servicios: 

– Personal: 

– Relación Calidad-Precio: 

NOTA FINAL: 8/10.

Sin lugar a dudas fue todo un acierto pasar una noche en este alojamiento, casi lo peor fue que apenas pudimos disfrutar del lugar, no nos hubiera venido mal poder pasar al menos otra noche más, pero desde luego como toma de contacto fue estupenda. Seguro que cuando volvamos por allí no nos importará repetir nuevamente, especialmente por volver a ver a Fabiola y a Peter, para los amantes de las motos, seguro que se os queda la boca abierta con la moto que tiene allí y que podéis ver en el vídeo de más arriba.

En conclusión, ofrece justo lo que propone, un lugar acogedor con un trato muy familiar en un entorno estupendo. Si vais por la zona de Benidorm y queréis escapar del bullicio y las aglomeraciones, al menos a la hora de dormir, sin duda un hotel muy a tener en cuenta. Si esta entrada os anima a visitarlo, aprovechar y darle saludos de nuestra parte 🙂