Como cada año desde hace ya mucho tiempo, Junio es el mes más intenso en trabajo y estudios de la temporada, por ello son pocos los momentos en que nos podemos permitir una escapada, encima con el calor las salidas de senderismo cada vez son menos frecuentes. A pesar de ello, el pasado 10 del presente mes decidimos conocer un zoo situado en la ciudad vecina de Fuengirola. Una forma de sumergirnos en la naturaleza y ver animales sin tener que hacer un largo viaje o emplear muchas horas de un tiempo ya de por si escaso.

Concretamente estuvimos en Bioparc Fuengirola, un parque zoológico de los denominados de inmersión, puesto que los animales no se encuentran tristemente encerrados en celdas con barrotes, sino que se intenta recrear su hábitat y que se encuentren de la mejor forma posible. Un nuevo modelo de zoo basado en el respeto a la naturaleza y la preservación de sus especies, un modelo que ya se ha convertido en un referente a nivel europeo.

Entrada a Bioparc de Fuengirola

Entrando en profundidad, este parque se centra íntegramente en la conservación de especies tropicales y adaptadas a medios selváticos, principalmente de Asia y África. Colabora con la Asociación Europea de Zoos y Acuarios (EAZA) en varios proyectos de conservación, como el dedicado a la fauna de Madagascar, así como el de cría de especies en peligro de extinción: anoa, hipopótamo pigmeo, gorila de costa, orangután de Borneo, lémures, etc

Para llegar no tendremos ningún problema en encontrar el lugar, está en el centro de Fuengirola, a sólo unos minutos andando de las terminales de autobuses y tren. Por carretera deberemos tomar la salida 208 de la autovía del Mediterráneo. Está abierto desde las 10 de la mañana todos los días del año y podéis ver los horarios según temporada en el siguiente enlace: Horarios de Bioparc.

El precio de la entrada normal es de 20,50 euros para los adultos (precios 2019) y 15,50 euros para niños de 3 a 9 y 16,50 euros jubilados. Para mi gusto un precio ligeramente alto. Aunque afortunadamente, es bastante común encontrar 2×1 o descuentos en los centros comerciales de la Costa del Sol.

Árbol Baobab en Bioparc de Fuengirola

La visita se puede realizar en aproximadamente unas 2 horas y media, 3 si nos lo tomamos con calma. Lo primero que vemos nada más entrar es uno de los iconos del parque, un majestuoso Árbol Baobab, de esta forma nos adentramos en el continente africano. La primera área que visitamos es África Ecuatorial.

Puente de lianas en Bioparc

Entre el Golfo de Guinea y las Montañas de la Luna se extienden los bosques lluviosos, estas pluviselvas seguramente sean las menos conocidas del mundo, ya que su impenetrabilidad las mantuvo vírgenes durante mucho tiempo. Lo primero que nos encontramos al cruzar un río si tiramos por el primer camino a la izquierda es a un lado una rivera repleta de Cocodrilos del Nilo, plácidamente tomando el sol junto a el lago.

Mientras que al otro lado, un nutrido grupo de flamencos, de esta forma se representa la rica biomasa que puebla ríos y lagos, las que antaño fueron las únicas vías para que los primeros exploradores se adentrasen en las selvas centroafricanas. Grandes cauces como el Nilo o el Congo permitieron que la civilización occidental llegase al corazón africano.

Puente de África Ecuatorial en Bioparc
Simios y babuinos en Bioparc

En la parte norte se encuentra una amplia área donde gran cantidad de macacos se divierte. Es una de las zonas mejor recreada, los monos y babuinos tienen varios árboles por los que colgarse y juguetear, en una de las paredes cuentan con varias cuevas en las que poder dormir. Como siempre estos simpáticos primates en muchos momentos se parecen demasiado a nosotros, en aquel día que hacía bastante calor, la mayoría se encontraban en la sombra para huir de los rayos del Sol, mientras que los más jóvenes tenían ganas de juego, como se puede apreciar en este vídeo:

Las grandes extensiones de árboles ceiba del oeste y centro del continente, salpicadas por peculiares claros, llamados bai, en la cuenca del río Congo, son el hogar de criaturas tan fascinantes como el gorila o el hipopótamo pigmeo.

Gorila de Bioparc Fuengirola

Mientras que los hipopótamos se mostraban apaciblemente tranquilos en el agua, el gorila por lo que vemos no tenía muchas ganas de visitas, prueba de ello es que no parecía poner muy buena cara mientras que lo grabamos 😀

En un corredor techado del Valle del Congo podemos ver leopardos, colobos y talapoines. Esta parte del paseo es un tanto limitada en cuanto a espacio, los animales en este corredor techado del valle no es que cuenten con mucha zona por la que moverse. Con esto damos por cerrado este área del parque destinada a recrear el paisaje de la África Ecuatorial.

Leopardo en Bioparc Fuengirola

Pero no abandonamos aún el continente africano, porque si atravesamos el tronco caído donde veremos escorpiones,  suricatas, puerto espines entre otros y nos adentraremos en Madagascar.

Ahora nos encontramos a los pies del Baobab. La inmensa isla de Madagascar es  uno de los 3 lugares donde se encuentra el árbol de Baobab, de hecho allí se pueden encontrar 6 de las 8 especies con que cuenta este singular árbol.  La especie representada en Bioparc Fuengirola es Adansonia digitata, común tanto en África subsahariana como en la isla malgache. Es la especie más conocida y numerosa. En la época de floración se cubre de un efímero manto de flores blancas y colgantes. Éstas darán lugar a frutos dulzones conocidos como “pan de mono”. La corteza es lisa. Puede alcanzar los 25 m. de altura y los 30 de diámetro.

Ruta por Baobab de Bioparc
Lemures en Bioparc Fuengirola

Para quien no lo sepa, Baobab significa árbol al revés, esto tiene lógica puesto que si lo miramos y vemos sus ramas, realmente parecen raíces como si estuvieran dadas la vuelta. En su interior es capaz de almacenar hasta 6.000 litros de agua, lo que le permite aguantar prolongadas sequías. Las tribus usan su agua y una vez secos, lo preparan para vivir dentro, esto y muchas cosas más nos las van contando en una visita guiada que se realiza cada 30 minutos en grupos de 50 personas. Hoy se sabe que existen algunos ejemplares de más de 3.000 años.

Separada del continente africano durante 160 millones de años, la fauna y flora de esta isla del Océano Índico han evolucionado aisladas, dando lugar a que el 80% de sus especies sólo se encuentren en Madagascar, es decir, son endemismos. Esta zona está actualmente en peligro, debido a que el hombre no deja incesantemente de talar sus bosques y ello hace que cada vez haya más territorio árido.

Mientras que un experto biólogo nos va contando gran cantidad de información sobre ese especial ecosistema, podremos tener junto a nosotros correteando al Lémur Catta, el Variegata o blanquinegro, el Lémur Negro y al Lémur Rojo. Las  cuatro especies se encuentran en grave peligro de extinción y forman parte de un programa europeo de cría en cautividad.

Tuvimos la enorme suerte de ver un lemur hembra que justamente había sido madre y tenía a su bebe todo el rato agarrado, el pequeño lemurcillo no se separaba ni un segundo mientras que tomaba el pecho, una imagen realmente preciosa 😀

Abandonamos África y nos vamos a Asía, concretamente al sudeste asiático. Desde la India hasta Nueva Guinea, pasando por Indochina, Malasia y a través de una cadena de más de 20.000 islas, se extiende el bosque lluvioso más antiguo del mundo. Las selvas orientales se formaron tras la extinción de los dinosaurios, hace 65 millones de años, y hoy albergan una riqueza biológica inigualable. Lo primero que hacemos es ir a buscar a el animal más representativo de este parque, el tigre blanco.

Tigre blanco en Bioparc Fuengirola

Se encuentra en una recreación del típico templo de Angkor. Esta especie está en peligro de extinción, quedan sólo 210 en todo el mundo la mayoría en cautiverio. Son animales de costumbres solitarias aunque se los puede ver en grupo de tres o cuatro. El tigre blanco es una derivación del tigre de Bengala, sus progenitores tienen un gen recesivo que les da el color blanco en la piel, que elimina el pigmento anaranjado, pero las rayas negras no se ven afectadas, y  transmite el gen a sus hijos. En la actualidad es difícil encontrar un tigre blanco en su hábitat natural.

Zona Angkor Wat en Bioparc

Contrario a lo que se piensa el tigre blanco nunca se ha visto en Siberia, sólo se han encontrado en la India, el primero fue capturado por el Maharajá  de Rewa, en el 1951, en la jungla de Rewa, aunque hace muchos años ya se habían visto. Seguramente su peculiar color es un aliciente para que sea el plato fuerte de muchos zoológicos, muchos de ellos intentan que se conserve la especie, ya que cuando se encuentran en su hábitat natural es fácil que no sobrevivan por culpa de los cazadores furtivos.

Descanso en Bioparc Fuengirola

En esta ocasión fuimos mi novia y yo a ver el parque, aquí estamos relajadamente en alguna de las zonas donde se puede uno sentar para descansar, en ella curiosamente había un buda, ya va quedando menos para estar realmente cerca de buda, apenas 1 mes 😀

La recreación de esta zona es estupenda, incluso podemos ver como cuando los bosques tropicales llegan al mar aparecen los manglares. Los manglares son árboles especializados, dotados de estilizadas raíces aéreas que se anclan en el barro de la orilla y mantienen el tronco y hojas por encima del nivel de las mareas, al mismo tiempo que protegen a la costa de la erosión. El exceso de sal se acumula en las hojas, que son repuestas periódicamente. Por esta zona encontramos ciervos, nutrias, tapir malayos y falsos gaviales entre otros.

Es posible coger audioguías, en las que durante todo el paseo en algunos puntos vemos números donde nos cuenta con opción de castellano, inglés, alemán y francés algunos datos interesantes de la zona y los animales que vamos viendo. En los paneles informativos nos van mostrando en que parte del parque estamos, ya que en muchos momentos esa fiel recreación de la selva nos hace despistarnos e información de los animales, útil si no tenemos audioguía.

Acuarios en Bioparc Fuengirola

En esta zona hay un dosel por el bosque, donde las aves se encuentran libremente por el área, una densa malla en el techo impiden que se puedan escapar, allí podemos ver loros, tucanes, cacatuas, grullas  y otros tantos.

Una de las cosas que más me gustaron del zoo, es que todo está muy bien configurado para que podamos ver todos los animales, no es raro ir a grandes parques con animales en los que si no tenemos suerte no se pueden ver o se ven de lejos, en esta ocasión se han hecho pasillos subterráneos en los que podemos ver hasta unas especies de acuarios para divisar perfectamente los peces que pueblan los ríos entre los manglares.

Aviario en el bosque de Bioparc

De ahí nos fuimos a una recreación de Mina Abandonada donde se encuentran gran variedad de reptiles, insectos y arácnidos, seguidamente hay un nuevo Aviario en el Bosque,  el techo de uralita impide que se vayan los pájaros que se encuentran en el lugar, podemos ver faisanes, patos mandarines, guras o zorros voladores de la India.

Como es natural en estos sitios no falta un restaurante, en este caso un chozo africano en el que poder comer algo si lo creemos conveniente, podemos pedir pizzas, hamburguesas, bocadillos, ensaladas e incluso cuentan con menú infantil, tenemos también la posibilidad de celebrar nuestro cumpleaños allí. Junto a él, existe un área infantil tematizada también, con toboganes, columpios y todo tipo de juegos para niños.

Anfibios en Bioparc Fuengirola

En el área del manglar, existe una cabaña con una exposición de anfibios en peligro. Hay que tener en cuenta que hoy, los manglares del mundo están amenazados por la acción del hombre. Su madera hace un carbón excelente, muy codiciado por industrias locales. Sus raíces especializadas son muy sensibles al chapapote, ya que el petróleo obstruye sus poros. Y grandes extensiones se destruyen para crear complejos turísticos. Eso hace que tanto la vegetación como los animales que vienen en esos entornos salgan muy mal parados. Lo que más nos llamó la atención fue la cantidad de ranas de distintos colores que habían, como dijo Carmen, «estaban todas las fichas del parchís» 😀

Para terminar la visita nos fuimos a la Exhibición «Claro de Selva», un espectáculo con aves y mamíferos que pretenden acercarnos al visitante un poco más a algunos animales de los bosques tropicales.

Exhibición «Claro de Selva» en Bioparc

El escenario recreado para la exhibición reproduce un claro de selva en torno a dos gigantescos árboles, una cascada, un río y vegetación tropical, donde el visitante se traslada al bosque tropical y disfruta de los animales con total ausencia de objetos e instrumentos ajenos a las especies animales.

Con una cercanía inusual, se puede conocer de primera mano el estilo de vida de algunos mamíferos como armadillos, coatíes, mapaches o nutrias, y aves como el Cálao, el Zopilote o las Kookaburras de Australia. Una de las cosas que más nos llamó la atención, es que todos los animales están entrenados de forma que en ningún momento del espectáculo, interviene alguna  persona en el número, salvo para dejar algo de comida en sitios estratégicos. Los animales presentes saben en todo momento donde tienen que ir y que hacer, dando lugar a situaciones de lo más cómicas.

Salimos muy contentos del espectáculo y de la visita en general, una tarde bien invertida en medio de un pequeño ecosistema en el que confluyen animales de Asía y África.

Un tema curioso es que durante los meses de Julio y Agosto el parque cierra a las 00.00 horas, por lo que es posible hacer visitar nocturnas y comprobar como se comportan los animales en esos horarios poco inusuales para los visitantes en general. Es posible incluso sacarse un pase anual que cuesta 40 euros, realmente si tenemos pensado ir varias veces en el año sale a cuenta.

Área de Madagascar en Bioparc Fuengirola

Nuestra visita al parque se prolongó durante 2 horas y 45 minutos, tiempo suficiente para desconectar de las obligaciones en un bello paraje. Uno de los puntos fuertes de la Costa del Sol, es que junto con esta reserva podemos visitar Selwo Aventura en Estepona, Selwo Marina y Sea Life en Benalmádena, todo este conjunto de parque se complementan perfectamente, cada uno está enfocado de forma distinta y una vez que se han visitado todos, te das cuenta que en apenas un radio de 70 kilómetros podemos dar un repaso a los ecosistemas del mundo sin apenas esfuerzo, para un amante de la naturaleza, los animales y plantas como soy yo, es todo un lujazo tener algo así tan cerca de casa. Espero algún día realizar algún safari por África y descubrir el lado más salvaje que nos brinda el planeta en que vivimos.

Enlaces de interés para visitar Bioparc (Organiza tu viaje):

[message color=»green»]

Autor

José Carlos DS: Economista y blogger de viajes en La Próxima Parada desde 2009. Ratón de ciudad, pero que le gusta la naturaleza por igual. Sus otras pasiones son el cine, los deportes y los videojuegos.

11 Comentarios

  1. Joder… pues si que parece que está bien este parque. Lo desconocía por completo. ¡¡El tigre albino me encanta!!

  2. Una tarde estupenda, con momentos entrañables y reviviendo la infancia XDD Los animales, muchos jóvenes, ofrecieron los momentos más divertidos de la tarde, pues estuvieron en plan juguetón, lo que nos arrancó muchas sonrisas.

    Fue un destino estupendo para despejar la mente de la época de exámenes 😀

  3. ¡Qué chulo está el parque! Hay otro bioparc en Valencia, y la verdad es que nunca me ha dado por ir (es que vamos mucho a Valencia) porque no sabía que era tan chulo. Pensaba que era como un zoo normal. Qué curioso lo de la recreación de los ambientes. No me parece que sea cara la entrada. El zoo de Madrid tiene más o menos esos precios y no es tan chulo el sitio.
    Saludos

  4. Lo reformaron hace unos años Victor. La verdad que ha quedado un sitio muy agradable de visitar.

    Nos vino genial esta escapadita Carmen, suerte que ya vamos finiquitando este mes de Junio 😀

    Pues el de Valencia M.C. parece que es un poco más grande, sobre todo la zona de África y hay animales que aquí no había como la jirafa, a mi es que me encantan los animalitos, cuando vuelva por Valencia, fijo que cae una visita jeje

    Artabria me alegro que te gustara, según he podido ver son muy similares uno y otro.

    Saludos!!!!

  5. Esta es una de mis visitas este verano con los niños. Yo estuve hace mucho tiempo pero veo que está muy bien cuidado y que merece la pena. ¡ Cómo van a disfrutar mis peques!!
    Saludos veraniegos

  6. Me acuerdo de haber ido de pequeño y recuerdo que había aves, cocodrilos, algún mono y poco más xD Ahora mola muchísimo más y esta todo perfectamente integrado, parece que estas en medio de la selva xD

    Buenas fotos! saludos!

  7. Fran tus niñas se lo van a pasar en grande, es un sitio ideal para que paséis una buena tarde rodeados de naturaleza y animalitos 😀

    La verdad José que mi madre que estuvo hace años con mi hermano dice lo mismo, que antes era un simple zoo con animales, ahora está todo tematizado y mucho más cuidado, da gusto realizar la visita.

    Saludos!!

  8. Pingback: Visitar Fuengirola ‹ La Próxima Parada

  9. hola quiero llevar a mi hija de 2 años podres llevarla con el carrito?como he visto que he muy grande por eso?gracias

    • Prácticamente todo el recinto cuenta con rampas para carritos, os tocará empujar un poco por algunas zonas, pero tiene áreas de descanso con bancos y sombra, además cuenta con buenas dimensiones, pero no es tan grande como parece, podéis ir sin problemas y además tu hija se lo pasará genial.

      Saludos!

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies