A finales del pasado mes de Septiembre hice una escapada en compañía de mis amigos y mi novia a la provincia de Jaén, el motivo es que fuimos invitados por una amiga a visitar su pueblo y de paso ver Jaén capital, por tanto aprovechamos un fin de semana para pasar 2 noches en la típica casa de campo jienense y hacer algo de turismo por la zona.
De pequeño estuve en Jaén pero apenas tenía leves recuerdos de los lugares donde estuve, por lo que no me podía perder una oportunidad así, turismo y naturaleza una combinación siempre perfecta.
El primer día lo dedicamos a visitar el pueblo de Martos, que era donde se encontraba la casa de campo y de donde era la amiga que nos invitó.
Para quien no tenga constancia de este pueblo, Martos es un municipio de la provincia de Jaén que cuenta con algo mas de 24.000 habitantes, siendo la quinta ciudad de la provincia en cuanto a población, pero se la considera una ciudad clave en el área metropolitana de Jaén, ya que es la segunda ciudad más importante de la zona debido a la industria que concentra. En este municipio se realizan importantes actividades fabriles relacionadas con la agricultura y existen minas de trípoli, que se extrae para usos industriales.
Martos está situado en el suroeste de la provincia de Jaén, a 24 km de la capital provincial. Se asienta entre La Campiña de Jaén y la zona noroccidental de las sierras Subbéticas, por lo que tiene bastante cerca la capital, lo que es algo a destacar.
Nosotros nos desplazamos desde Málaga por la A-45 pero al llegar a Lucena la autovía deja paso a una carretera con un carril para cada sentido de circulación, una pena que todo el camino no fuera por autovía, pero era la forma más rápida de llegar, apenas 2 horas de camino, si por el contrario hubiéramos optado por ir pasando por Granada hubieran sido casi 45 minutos más, eso sí, todo por autovía.
Por tanto dejamos el mar azul a nuestras espaldas y comenzamos nuestra marcha, pero no por estar en el interior significa que no volveríamos a ver el mar, quizás si como estamos acostumbrados a verlo en el Mediterráneo, el mar que se encuentra en Jaén es diferente, de color verde y con un olor a orujo que o lo amas o lo odias.
Así perdidos entre olivos al fin llegamos a Martos. Lo primero fue aparcar el coche, no es que pueda dar un secreto mágico para decir donde se puede aparcar sin problemas, pero las calles aledañas a la Avenida Moris Morrodán pueden ser un buen lugar para estación nuestro vehículo, en caso de llegar en bus, allí se encuentra también la estación de autobuses, por lo que no tiene pérdida para continuar siguiendo el relato, ya que nos encontraremos en el mismo punto.
En visitar este municipio usamos una tarde, pero si se quiere ver con calma y sin perdernos nada lo mejor es usar un día entero, nosotros contábamos con la preeminencia de que la amiga que nos invitó y el hermano eran de allí y nos hicieron de guías perfectamente, por lo tanto jugábamos con esa ventaja añadida.
Ruta Turística de Martos
El circuito que realizamos por el pueblo es casi circular, por lo que será sencillo realizar la visita sin perderse ningún detalle que merezca la pena, con anotar los sitios característicos iremos sobre seguro, no obstante aquí os adjunto un mapa que espero que sea aclaratorio para ver por donde nos movimos:
Comenzamos en la citada Avenida Moris Morrodán, una vía con varias terrazas para tomar algo y que en su parte central cuenta con un paseo peatonal, desde allí nos movimos hacia su izquierda, tal como vemos en el mapa, caminando por sus calles nuestra primera parada sería la Plaza de San Francisco, aunque antes pudimos disfrutar de nobles casas como la de la siguiente imagen:
Una mezcla de estilos donde destaca la arquitectura morisca sobre el resto, reflejando el pasado del pueblo en su fachada.

Cuando llegamos a esta plaza los tiempos de ir por calles llanas habían terminado, ahora comenzaba una parte de la visita en la que empinadas cuestas nos ponían a prueba, por suerte esta zona era francamente bonita, por lo que no nos importaba en demasía esta ascensión, al menos a algunos 😀
Este bonito ventanal pertenece al antiguo F.P. que en la actualidad lo están reformando.
En el primer tramo aún había espacio para que pasaran los coches, pero en la recta final las estrechas calles empedradas apenas dejaban pasar a un grupo de personas deseosos de llegar arriba, por suerte en Septiembre la temperatura es ideal, ni frío ni calor, nada que ver con el invierno e incluso la primavera donde las temperaturas son demasiado frescas y no es tan placentero caminar por sus calles.
Nuestro siguiente objetivo era llegar a la plaza del Ayuntamiento, pero antes nos dimos de bruces con el Convento de las Hermanas Trinitarias, donde las monjas viven y se dedican a meditar, rezar, hacer dulces… De entre todos los productos que elaboran los que más fama tienen son sus empanadillas.
Poco después se llega a la Plaza de la Constitución, allí se encuentra el Ayuntamiento, la Iglesia de Santa Marta y un parque en su parte central.
El Ayuntamiento está considerado como joya del manierismo andaluz. Construido por Francisco del Castillo «El Mozo», fue destinado al uso como cárcel y cabildo de la Villa allá por el año 1557, su fachada cuenta con una colección de lápidas con inscripciones romanas.
Como dijimos, allí se encuentra también la Real Iglesia Parroquial de Santa Marta. Construcción levantada en el corazón de la vieja villa, sobre las ruinas de una mezquita árabe de 1219 como consecuencia de la conquista de la villa a los árabes por Fernando III de Castilla. La iglesia está consagrada a la patrona de la ciudad, Santa Marta. Junto a ella se levanta la hermosa Capilla de Nuestro Padre Jesús Nazareno.
En ella se encuentran sepultados, según la tradición, los restos de los hermanos Carvajales, caballeros de la Orden de Calatrava, que fueron ejecutados en Martos en 1312 por orden de Fernando IV el Emplazado, rey de Castilla y León.
Rodeamos la plaza y continuamos nuestra marcha, en esta ocasión hacia la Torre Almedina.
Restos de las murallas que fortificaban el castillo de la villa de Martos en la calle Real de San Fernando. Poco después se encuentra la calle de Camarín, que cuenta con un bonito mirador desde el que se contempla el barrio de San Amador con la Peña al fondo, de la cual hablaré más adelante.
Hacia la derecha podremos divisar también la torre campanario de la Villa, que forma parte del Santuario de Santa María de la Villa.
Este Santuario tuvo su primera construcción en los años inmediatamente posteriores a la conquista cristiana. En el siglo XVI fue totalmente reedificada por el arquitecto Francisco del Castillo, que fue enterrado en la misma. En la guerra civil el templo fue parcialmente destruido y quemada por el ejército republicano y en la década de los cuarenta fue demolido y reconstruido sobre el mismo solar, en estilo neo-barroco.
En su interior se venera a María Santísima de la Villa, la Labradora. En la cripta reposan los restos de los mártires de la Guerra Civil.

En la espalda del monumento religioso también se puede disfrutar de una bellísima panorámica de todo Martos, incluida la zona industrial de Cañada de la Fuente.
En los últimos 20 años se ha consolidado la formación de un importante tejido empresarial en esa zona, teniendo un importante peso la industria automovilistica con la presencia de la multinacional francesa Valeo, también tienen importancia el ramo del metal, la industria química, la cerámica. la confección y el plástico.
Es momento de dar media vuelta y volver a la plaza de la Constitución, no sin antes ver el Castillo de la Villa.

El castillo se asienta sobre un cerro rocoso en el que en época ibero-romana se encontraba la acrópolis de la ciudad de Tucci, convertido en época islámica en Hisn. Su estructura fue alterada en sucesivas ocasiones, siendo durante la época cristiana, con la Orden de Calatrava, cuando se produzca la más importante reforma, la construcción en el alcázar de una gran Torre del Homenaje, así como otras diversas torres y murallas.
Una vez vista esta zona cogimos la calle de Adarve, que se encuentra a la izquierda del Ayuntamiento y comenzamos de nuevo a ascender camino de las faldas de la Peña, primero encontraremos la Ermita de San Bartolomé.
Y si cogemos un camino que asciende por su izquierda llegamos al fin al Paseo del Calvario.
Esta es una avenida peatonal de unos 450 metros de longitud situada a las faldas de la Peña y lugar de reunión de numerosos jóvenes y desde donde volvemos a tener unas excelentes vistas de Martos, esta vez ya con la noche totalmente cerrada.
Desde este lugar podemos ascender a La Peña, este cerro testigo del Prebético formado básicamente por roca caliza que alcanza los 1.003 m de altitud. Por falta de tiempo no pudimos ascender a ella pero en su cima existen los restos de un castillo medieval, el «Castillo de la Peña». Si desde el paseo donde se ha tomado esta foto, la panorámica era increíble, no me quiero imaginar cómo será desde todo lo alto, sin duda algo por lo que tendremos que volver para cumplirlo, hay que citar también que el último fin de semana de mayo se celebra la romería de la “Reina de la Peña” de Martos al pie de la Peña. La Virgen es bajada de su ermita a Martos el viernes anterior, donde se le realiza una ofrenda floral. El sábado es subida a su ermita en una típica romería llena de colorido, carrozas y buen ambiente, por lo que no sería una mala fecha para realizar una visita a Martos.
No me puedo olvidar de profundizar más en la leyenda que ronda esta peña y que levemente cite anteriormente, ya que en tiempos de Fernando IV el Emplazado, se dice que fueron ajusticiados dos hombres en aquel lugar, la historia completa dice así:
«En el año 1312, hallándose el rey Fernando IV el Emplazado en la ciudad de Palencia, llegó a sus oídos la noticia de la muerte que el caballero Juan de Benavides, privado del rey de Castilla, había sufrido a manos de dos hombres. La autoría del crimen fue atribuida a los hermanos Carvajales, caballeros de la Orden de Calatrava.
En 1312, después de su paso por la ciudad de Jaén, el rey Fernando IV se dirigió a la localidad jienense de Martos y, hallándose allí, condenó a muerte a los hermanos Carvajales, quienes, según la leyenda, pues ello no figura en las crónicas de la época, fueron condenados a ser introducidos en una jaula de hierro con púas afiladas en su interior, y a ser arrojados desde la cumbre de la Peña de Martos. Según refiere la Crónica de Fernando IV, de modo similar a como lo hace la Crónica de Alfonso XI, los hermanos Carvajales, antes de ser ejecutados, emplazaron al rey Fernando IV a comparecer ante Dios en un plazo de treinta días, por la muerte injusta que el monarca ordenaba darles».
El paseo cuenta con varias figuras que ornamentales, entre las que me llamó la atención este excéntrico monumento de piedra con tintes picasianos. Sin tiempo para más pues era ya la hora de cenar, comenzamos a descender por la Calle del Molino de Medel para volver al pueblo y terminar nuestra visita en el Parque Manuel Carrasco.
Es el parque más grande con el que cuenta la localidad con una extensión aproximada de 65.000 m². Podemos encontrar un parque infantil y numerosos equipamientos culturales y de ocio. En sus alrededores también está el Pilar de la Fuente Nueva, la piscina municipal y la Plaza de Toros.
Respira mucha vida incluso durante la noche, donde los jóvenes van a socializarse por la zona, unos de una forma más sanas que otros, en su parte central se encuentra un coqueto templete. El papel del agua fue muy importante en su concepción, por eso no falta varias fuentes, en esta de abajo se puede ver a mi novia posando como es menester.
Allí también se encuentra el Teatro municipal «Maestro Álvarez Alonso» con un estilo moderno y vanguardista, inaugurado en 2006.
Aprovechando uno de los accesos al Teatro en forma de caracol los integrantes de esta visita a Martos se colocaron para ser fotografiados, para dejar una huella de que estuvieron allí.
Como se puede ver unos estaban más atentos a la foto que otros, a saber que estaba mirando más de uno en ese momento ¿eh? Fran… 😛
Así dimos finalizada la visita a Martos, aunque como última captura del momento os dejaré con una evocadora visión de la noche de Martos y su iluminado Santuario de Santa María de la Villa con el Castillo al fondo.
El resto de la noche lo invertimos en cenar junto al Parque, concretamente en la Avenida Pierre Cibie, un buen lugar para comer ya que está rodeado de restaurantes, bares y mesones y que también cuenta con varios pubs para alargar la noche lo que uno crea conveniente.
Así termina este tour por Martos, espero que sea del agrado de todos y la próxima cita será un reportaje de lo se debe ver imprescindiblemente si se visita Jaén capital.
18 Comentarios
Pueblazo, si señor 😀
nos lo pasamos genial!! muy bueno el reportaje 😀
La verdad es que el día se pasó volando y nos dio tiempo a hacer un montón de cosas porque está todo cerca de todo. Se van concadenando los distintos lugares de interés haciendo un circuito cerrado. También hay que decir que contamos con una guía turística de excepción 😛
Un reportaje de lo más completo con lo más destacado 😀
Emocionaisimaaaa, no me avergüenza decir que se me ha escapao más de una lagrimilla,je,je, muchisimas gracias y enhorabuena. Agradecer de nuevo a todos ese fin de semana tan especial e importante para mi 🙂
Me alegra que os haya gustado a todos esta primera entrega con el repaso a lo que vimos en Martos, próximamente Jaén capital.
Fue un placer total visitar Martos y contar con 2 guías tan buenos 😀
buen reportage solo una errata la que tu has llamado torre albarrana (no se de donde lo has sacado jajaja) se llama torre almedina de hecho la calle que colinda es almedina ya que vivi alli unos años por lo demas un gran reportage
Un pueblo para vivir sin problemas 😉
Joe tio te a qedado genial que fenomero eres la verdad que has puesto cosas que ni yo sabia de echo lan visto mis amigos y le a encantado te las currao jeje
Un saludo
Mi mas sincera ENHORABUENA por este reportaje tan fabuloso, ahora entiendo ese despliegue de material fotografico que puede llegar a ser excesivo para tomar un simple recuerdo, pero que es necesario para plasmar lo que sientes en ese momento.
Gracias por hacerme sentir orgullosa una vez mas de mis raices y por desvelarme parte de una historia de mi pueblo que no conocia.
Me parece admirable tu labor, ofrecer al mundo la oportunidad de sentir lo que tu sientes en tus viajes y asi ofrecer parte de esas sensaciones y vivencias que supongo marcan tu vida. Nuestros actos son el sello que nos identifica y yo pude verte un poco mas por dentro hoy.
NO PERTENECEMOS A UN LUGAR POR ESTAR ALLI, SINO POR SER QUIENES SOMOS.
Fue un inmenso placer conoceros a todos, expecialmente a Fran y Kike, pues me senti parte de todos vosotros simplemente por formar parte de su vida.
Un abrazo especial
Vaya parece que ha cuajado bien el reportaje hasta entre los marteños, no sabéis lo que me alegro jeje
Alberto corregido el apunte que me has hecho, echa la culpa a la wikipedia que es la que me ha engañado xDDD
No dudéis que ya volveremos por esas tierras, que todos nos quedamos con ganas de subir a todo lo alto de La Peña jeje
Saludos 😉
He visto el reportaje y me ha gustado mucho, así nos haces publicidad del pueblo (soy marteña), jeje! También he leído los comentarios y por lo que veo hubo una confusión con el nombre de las torres, como bien dicen arriba la torre de la foto es la torre Almedina, que está en la calle del mismo nombre. Yo sólo quería aclarar que la torre que hay en la calle Real sí se llama Albarrana, para quien no lo sepa.
Un saludo!
Me alegro que te guste el reportaje Lucía, a mi me pareció un pueblo muy entretenido y pasamos una tarde muy agradable, espero volver alguna vez para hacer alguna ruta de senderismo por allí, que había zonas que pintaban muy bien.
En cuanto a lo de la torre, aclarado entonces, ya lo corregí hace unos días jeje
Saludos 😉
Hola a todos, como marteña que soy y me considero, mi más sincera ENHORABUENA, muy buen trabajo, gracias por regalarnos a los marteños y marteñas este paseo tan inolvidable que pasasteis y que nos habeis hecho pasar. Gracias a él he conocido cosas que aún no conocía con gran certeza, la verdad que esta ciudad, aporta muchas cosas importantes a toda persona ajena que no tenga constancia de su existencia. Como ya he dicho, os felicito de corazón, me habeis transmitido orgullo de ciudadana con todo lo reflejado de mi pueblo. Gracias y un saludo
Muy buenas Lucía, me alegra un montonazo que a todos los marteños/as os haya hecho ilusión ver mi reportaje sobre vuestra pueblo 😀
Una cosa, Lucía debe ser el nombre más común allí no? porque aquí ya cuento 3 de momento jaja
Saludos 😉
He tenido el placer de visitar estas ciudades en un viaje que realice a España; y me he quedado encantada con ellas.
Que hermosos lugares, sus calles, sus grandes monumentos historicos, ricos en arquitectura, son dignos de captar en imagenes.
Fueron unas vacaciones que he disfrutado a lo maximo, con ganas de repetirlas.
Me alegra que te haya gustado tanto b&b, la verdad que son 2 lugares con mucha historia y que bien merece una visita.
Saludos!!! 😉
Vaya muy buen reportaje. Soy de martos y despues de leer tu viaje valoro mucho mas mi pueblo 😀
Me alegra que te guste y más viniendo de un marteño. La verdad que fue una visita que nos encantó y encima íbamos en buena compañía.
Un saludote!